martes, 9 de septiembre de 2008

Valentín Letelier (1852-1919), gran personaje en la historia de la educación chilena




Valentín Letelier Madariaga fue uno de los intelectuales chilenos más destacados de su época, cuyos aportes de mayor relevancia fueron la renovación del sistema de educación pública y la introducción en el país de los estudios sociológicos. Letelier nació en Linares en 1852 y cursó su educación primaria en la vecina Talca. En 1867 ingresó al curso de Humanidades en el Instituto Nacional de Santiago, para continuar más tarde los estudios de Derecho en la Universidad de Chile. Para financiarlos, se desempeñó como profesor de historia en el Instituto Americano e inspector suplente del Instituto Nacional.
De sus últimos años en el Instituto e inicios de la Universidad datan sus primeras aproximaciones a la filosofía positivista, escuela que enfatiza el empleo de principios materiales y racionales para la comprensión de fenómenos científicos y sociales. Comenzó a aplicar esta doctrina en la educación en 1875, cuando fue nombrado profesor de literatura y filosofía en el Liceo de Copiapó, una vez terminados sus estudios de Derecho.
En 1881 fue designado secretario de la embajada chilena en Berlín, lo que le permitió enriquecer sus reflexiones filosóficas y conocer un modelo de educación pública que podía servir de ejemplo para la reforma de la enseñanza en Chile. De regreso en el país, remeció al ambiente intelectual con dos ensayos que promovían la introducción de paradigmas sociológicos en el estudio de la historia y la política. Paralelamente, asumió la Cátedra de Derecho Administrativo en la Universidad de Chile alcanzando, en 1906, el honor de ser elegido por dos períodos rector de la Universidad de Chile. En 1913, Letelier renunció a la rectoría para dedicar los últimos años de su vida a la redacción de dos obras que reunieron su aporte a las ciencias sociales en Chile.
Letelier fue, además de pensador, un importante ideólogo del radicalismo y fue elegido diputado por su partido entre 1879 y 1888. Ante la emergencia de la cuestión social, Letelier difundió las ideas socialdemócratas e impulsó la alianza con el partido Demócrata. Su admiración por el socialismo de estado alemán impulsado por Bismark -que implementó las leyes sociales de seguro obrero, de indemnización por accidentes del trabajo y de pensiones de invalidez o ancianidad- se profundizó luego de su estada en Alemania. Sin embargo, su pensamiento no puede definirse como "socialista": Letelier fue partidario de la legislación social, no del socialismo; de la propiedad individual y no de la lucha de clases.

Renovación del sistema de educación pública
Luis Galdames, discípulo de Letelier escribió acerca de la vida y obra de éste a partir de recuerdos y estudios. Trata especialmente los aspectos doctrinarios del pensamiento de Letelier pero los aborda desde su biografía pues, a juicio de Galdames, las doctrinas no se explican suficientemente si se prescinde de los hombres que como tales las conciben y las difunden, ni del medio social en que ellos actúan. La obra de Galdames trata de la labor de Letelier en el Consejo de Instrucción Pública, destacando su interés por regularizar y otorgar estabilidad al profesorado. Analiza además la labor de Letelier en la organización del Congreso General de Enseñanza Pública de 1902 y en la creación de las Bases Generales de Reorganización de la Enseñanza Nacional, que otorga especial énfasis en la armonía que debe existir entre la enseñanza humanista y la enseñanza técnica.
Modelo de educación pública
Conocedor del deplorable estado de la educación en Chile, en este trabajo Letelier se propone estudiar concienzudamente la educación en Alemania y propone las bases de una reforma a la educación en nuestro país. En este contexto examina la educación preescolar, la escuela primaria, la disciplina escolar, los contenidos de la enseñanza prusiana y la instrucción secundaria y universitaria.
Reformador educacional
De regreso en Chile (1885), Letelier tuvo la ocasión de madurar toda la experiencia adquirida. Ganó dos concursos literarios (1886) con sus polémicas obras De la Ciencia Política en Chile y Por Qué se Rehace la Historia, y pronto se vio empeñado en la reforma de la enseñanza y su extensión. Logró el envío de profesores a perfeccionarse al extranjero e incorporar el curso de trabajos manuales en los colegios. Abogó por la enseñanza de la mujer y contribuyó al establecimiento del sistema concéntrico de estudios, y a la creación del Instituto Pedagógico (1889).
Académico y pensador liberal
Valiosísimo fue también su aporte a la enseñanza universitaria como profesor de Derecho Administrativo en la Escuela de Leyes en 1888. Planteó una orientación científica y sociológica, ajena a todo dogmatismo. Desde la cátedra y sus escritos abogó por la reforma del plan de estudios jurídicos.Continuó participando en política. El mismo año fue elegido diputado por Talca y en noviembre le tocó redactar el programa del Partido Radical. En su escrito Ellos y Nosotros (octubre 1889) aludió a los liberales y expuso la teoría de su partido: el amor por principio, el orden por base y el progreso por fin.